Reducir las emisiones producidas por la industria del cemento, también es una estrategia clave para el sector en América Latina. Asimismo, ofrecer productos cada vez más especializados se convierte en la prioridad de las empresas que brindan soluciones en cemento y concreto para satisfacer un mercado más exigente.
Las 10 principales empresas de este subsector alcanzaron ventas por más de 812 millones de dólares con Holcim Ecuador como líder cuyo objetivo más retador es lograr la descarbonización y liderar la transformación sostenible de la industria de la construcción.
En los últimos dos años, la compañía invirtió alrededor de 24 millones de dólares en proyectos para la descarbonización de sus operaciones de hornos rotatorios con el compromiso de construir progreso para las personas y el planeta. Estos incluyen contar con la flota vehicular más grande del país, la implementación de la primera planta automatizada de clasificación de residuos en Samborondón y nuevos proyectos para reducir la huella de carbono de sus soluciones con cementos ECOPlanet.
Para este año, según Dolores Prado, CEO de Holcim Ecuador, se presentarán al mercado nuevas soluciones, entre ellas Hydromedia, un sistema de concreto permeable que permite la recuperación y aprovechamiento del agua. También habrá novedades en el concreto sostenible ECOPact, que reduce en un 40% las emisiones de CO2.
El pasado mes de marzo la Federación Interamericana del Cemento (FICEM) junto al Instituto Ecuatoriano del Cemento y el Concreto (INECYC), que entre sus socios incluye a Unacem, UCEM e Induatenas, presentaron el documento denominado: Hoja de Ruta Ecuador-FICEM: Hacia una economía baja en carbono, esta iniciativa está marcando el rumbo para la descarbonización de la industria cementera en América Latina.
Esta Hoja de Ruta ya está implementada en el 80% de los países de América Latina. El objetivo prioritario es que la producción de 1 tonelada de cemento no genere más de 520 kilogramos de emisiones de CO2 para el 2030.
Hablando otros casos particulares en America Latina, Unacem y Argos, al igual que Holcim, forman parte de las cementeras que le apuestan a la descarbonización de la industria cementera en esta región. Unacem, que cuenta con un portafolio de empresas en los negocios de cemento, concreto, energía y servicios, con presencia en Perú, Ecuador, Chile, Colombia y Estados Unidos, tiene como meta alcanzar emisiones netas de 500 kg de CO2 por tonelada de cemento al 2030. En 2023, las emisiones de la compañía fueron de 607 kg de CO2 por tonelada de cemento.
En el caso de Argos, luego de un proceso de auditoría, la iniciativa Science Based Targets (SBTi) validó su meta de reducir las emisiones de CO2 en un 21% al 2030, reconociendo la vigencia de su hoja de ruta de cambio climático con proyectos específicos comprobados. La empresa está avanzando en proyectos para optimizar el uso de clínker y la eficiencia energética, aumentar los combustibles alternativos, reducir el factor clínker-cemento e incrementar el uso de gas natural.
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